Este jueves, la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires debatirá un proyecto de ley que busca restituir al Club Platense la administración del terreno ubicado en la intersección de las calles Manuela Pedraza y Crámer, en el barrio de Núñez, el cual fue expropiado en el año 1971
En el barrio de Núñez, en la esquina de las calles Manuela Pedraza y Crámer, el tiempo parece haberse detenido. Décadas atrás, ese lugar resonaba con la pasión de los hinchas del Club Atlético Platense. Los tablones de madera crujían bajo el entusiasmo de miles de aficionados que se congregaban para alentar a su equipo, mientras el vecindario se contagiaba del bullicio de un espacio que trascendía su función como estadio: era un punto de encuentro, un símbolo de comunidad y pertenencia. Sin embargo, un desalojo forzoso en 1971, ejecutado durante el gobierno de facto del entonces presidente Alejandro Agustín Lanusse, marcó un punto de inflexión en la historia del club y del barrio. Hoy, más de 50 años después, Platense se encuentra a un paso de recuperar este emblemático terreno, y con ello, una parte esencial de su identidad.
La emblemática esquina fue testigo de mucho más que encuentros futbolísticos. En el predio funcionaron un velódromo, que en su momento fue el único de la ciudad, y canchas de básquet y tenis. También se organizaron bailes de Carnaval y reuniones familiares, consolidando el lugar como un espacio donde deporte, cultura y comunidad convergían en perfecta armonía. Sin embargo, la situación cambió drásticamente cuando el gobierno de facto expropió el terreno a la familia Delcasse, sus legítimos propietarios, bajo el pretexto de construir viviendas. En su lugar, se edificaron una escuela y un polideportivo, que con el tiempo fue concesionado a empresas privadas. Inaugurado en 1992, el polideportivo, conocido como «El Poli», actualmente funciona como un centro de actividades deportivas y recreativas para la comunidad, bajo la gestión de la empresa privada Mundo Fútbol S.A.
Este jueves, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires debatirá un proyecto de ley que propone devolver al Club Atlético Platense la administración de su histórico predio en Núñez. La iniciativa establece condiciones específicas, entre ellas, la prohibición del regreso del fútbol profesional, una disposición clave para abordar las inquietudes de los vecinos respecto a la posible presencia de barras bravas y el caos asociado a la actividad de un estadio. En cambio, el club tiene previsto destinar el espacio a la realización de actividades deportivas, sociales y culturales orientadas al beneficio de toda la comunidad. Con doble lectura aprobada, el proyecto será sometido a votación final este jueves para definir su conversión en ley.
El vínculo entre el Club Atlético Platense y el predio ubicado en Manuela Pedraza y Crámer se estableció en 1917, cuando la institución alquiló el terreno al abogado Carlos Delcasse. Sin embargo, en 1971, esta relación se interrumpió de manera abrupta debido a un desalojo, un hecho que marcó un antes y un después en la historia del club. Obligado a trasladar sus actividades a Vicente López, en el predio de Juan Zufriategui 2021, Platense dejó atrás su sede en Núñez, pero no así su arraigo emocional con el barrio. Durante más de cinco décadas, dirigentes y aficionados trabajaron de manera incansable para recuperar el espacio que siempre consideraron su verdadero hogar.
El proyecto de ley que será sometido a debate este jueves representa la culminación de décadas de esfuerzo por parte del Club Atlético Platense y, al mismo tiempo, el inicio de una nueva etapa en su historia. La institución presentó un plan detallado para el uso del predio, que prevé la continuidad de las actividades deportivas ya existentes, la incorporación de nuevas disciplinas y la organización de talleres culturales. Asimismo, el proyecto incluye programas específicos dirigidos a adultos mayores y estudiantes de escuelas públicas, con el propósito de convertir el espacio en un lugar accesible, inclusivo y plenamente integrado a la comunidad.
El camino del debate del proyecto incluyó siete audiencias públicas en las que participaron más de 1300 personas. La mayoría de las intervenciones fueron favorables al regreso de Platense, destacando el valor histórico y cultural del predio. “Desde el momento en que asumimos la responsabilidad del club, este fue uno de nuestros objetivos principales. Queremos devolverle al barrio lo que siempre fue suyo”, afirmó Sebastián Ordóñez, presidente de Platense, durante una de las audiencias.
